La industria de dispositivos médicos en México es una de las más importantes; a nivel global nuestro país se ubica como el 8.º exportador y el 1.º en América Latina, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID).
En México, este sector cuenta con más de 40 plantas de producción, genera más de 130,000 empleos y 4,909 millones de dólares en valor de mercado, con base en datos de la AMID, que preside Fernando Oliveros.
El brote del nuevo coronavirus (Covid-19) en el mundo provocó un aumento en la demanda de insumos médicos. Por ello, esta industria en México intensificó las estrategias para poder satisfacer los requerimientos y responder de forma rápida a la demanda. Ejemplo de ello son las empresas Avicos Automation, TCC, Convatec–Unomedical Devices y Haemotronic Advanced Medical Technologies.
CLÚSTERES MÁS IMPORTANTES
Los clústeres más importantes de esta industria están ubicados en el norte del país: Tijuana, Tamaulipas, Ciudad Juárez y Nuevo León.
A decir de Cecilia Varela, directora del Clúster Bio Juárez, más de 35 empresas fabrican este tipo de productos en la región. Aproximadamente, el 95% opera en Ciudad Juárez y emplea a cerca de 40,000 trabajadores. Estas empresas producen dispositivos clase I, II y III (clasificación de acuerdo con el riesgo que implica su uso).
La región Juárez-El Paso es el principal proveedor de Estados Unidos y, en cuestión de inversión extranjera, el estado de Chihuahua registra 73.45 millones de dólares, superando a otros estados como Baja California y Estado de México, Sonora y Tamaulipas.
Entre los dispositivos que se fabrican en la región se encuentran los siguientes:
• Dispositivos basados en catéteres
• Soportes ortopédicos
• Equipo quirúrgico
• Stents aórticos y torácicos
• Equipo de diagnóstico por imagen
• Kits de cirugía
• PCBA electrónico para dispositivos médicos
• Cinturones de presión
• Dispositivos respiratorios
• Dispositivos oftálmicos
• Bombas de infusión electrónicas y mecánicas
El sector de dispositivos médicos de Chihuahua en el país juega un rol muy importante, ya que es el segundo estado con mayor producción de dispositivos médicos en México.
Además, muchos de los componentes o productos manufacturados que deben ser exportados para la terminación de su proceso productivo regresan al país a través de la venta directa por parte de la empresa dueña del producto.
Por otro lado, muchas empresas de Juárez lideran la estrategia para producir y desarrollar suministros médicos de emergencia en respuesta al brote de Covid-19, a nivel regional y global.
Las empresas mantienen la producción de suministros y equipos médicos esenciales, a pesar de las graves interrupciones de la cadena de suministro debido a la gran cantidad de las materias primas que salen de Asia y otros sitios afectados por Covid-19.
“Al igual que el resto del mundo, es esencial que los manufactureros de nuestra región continúen con la producción a los niveles actuales o incluso aumentados, para suministrar los Equipos de Protección Personal (PPE, por sus siglas en inglés), ventiladores y otros dispositivos necesarios para nuestras comunidades y para el mundo en general, tanto para las necesidades médicas diarias, como para dar respuesta a la pandemia”, explicó Cecilia Varela, directora del Clúster Bio.
En este sentido, algunas empresas diferentes a este ramo han apartado algunas líneas de producción para fabricar estos productos, con el objetivo de suplir la creciente demanda de dispositivos médicos y de higiene en la ciudad.
Un ejemplo de esta situación son algunas de las compañías agremiadas de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) en Ciudad Juárez, que reúne a empresas de todo tipo, pero principalmente a aquellas dedicadas a servicios y productos de la industria maquiladora.
De acuerdo con Thor Salayandía, presidente de Canacintra en Ciudad Juárez, algunos de sus miembros han buscado producir dispositivos médicos para combatir la situación del Covid-19.
Salayandía mencionó que algunas empresas ahora producen cubrebocas, caretas, batas quirúrgicas, entre otros. Dos ejemplos son Avicos Automation, que actualmente fabrica ventiladores; y Comercializadora GTZ, fabricante de textiles y consumibles, que ahora hace cubrebocas lavables.
Avicos Automation es una empresa dedicada a la Automatización de procesos para la industria maquiladora con clientes en México, Estados Unidos, Canadá y China. Sus productos principales son máquinas de prueba eléctrica para las diferentes fabricaciones de sus clientes, como motores de corriente directa para la industria automotriz, motores eléctricos de AC, componentes para refrigeradores y lavadoras, sistemas lumbares automotrices, entre otros.
De acuerdo con Juan Martínez, gerente de Avicos Automation, actualmente tienen una capacidad de producción de cuatro máquinas automáticas por mes en promedio. Ante el incremento en la demanda de dispositivos y equipo médico, desarrollaron de un ventilador de bajo costo y de fácil fabricación, máscaras protectoras y cubos protectores de acrílico para intubación y evitar la contaminación por aerosol.
Por otra parte, TCC es una empresa mexicana fabricante de impresoras 3D para mercados industriales. También, realiza celdas para granjas de impresión 3D en alto volumen, acabados, pintura electrostática, pintura líquida para plásticos e inyección de plástico.
Ante el incremento en la demanda de dispositivos y equipo médico, las acciones que implementó la empresa fue el desarrollo y fabricación de ventiladores profesionales basados en turbina y con interface para telemedicina y cibermedicina.
Dentro de las líneas de producción que han aumentado y adaptado para fabricar equipos esenciales en el combate a coronavirus se encuentran la de impresión 3D. Originalmente, se requirió una inversión para estos productos, la cual se hizo en conjunto con el nodo del Instituto Tecnológico de Ciudad Juárez y la mega región Sonora-Arizona. Además, se está buscando inversión para iniciar manufactura de ventiladores lo antes posible.
“El plan es iniciar 100% al mercado mexicano, luego a Estados Unidos y resto del Mundo. Estos son productos de tecnología 100% mexicana”, detalló Miguel Miramontes, de TCC.
SECTOR ESTRATÉGICO
En tanto, en la región de Tamaulipas, la producción de equipamiento médico ha incrementado su capacidad gracias al ensamble y fabricación de equipo médico, inyección de plástico, elaboración de instrumentos para la aplicación de insulina y la creación de insumos y productos como equipo de limpieza por ultrasonido, fabricación de mascarillas y nebulizadores.
De acuerdo con información del gobierno del estado, en Tamaulipas hay 13 empresas pertenecientes a esta industria, principalmente asentadas en Nuevo Laredo, Matamoros y Reynosa, las cuales generan 15,275 empleos.
La compañía Convatec–Unomedical Devices, llegó a Reynosa en el 2000 e inició operaciones en el 2001. Se dedica su producción a la elaboración de dispositivos médicos de infusión de insulina, mismos que trabajan mediante una bomba microinfusora que es principalmente utilizada en pacientes con diabetes tipo I.
“Somos el proveedor más grande de dispositivos de infusión, no existe otra parte en el mundo que maneje tanto volumen de dispositivos de infusión como nosotros en Reynosa”, destacó Yamil Ramírez, director de planta Convatec.
Agregó que desde que arrancaron operaciones en el 2000, hoy en día su volumen de producción es veinte veces mayor al que manejaban cuando iniciaron.
Ante el incremento en la demanda de dispositivos y equipo médico, Convatec ha implementado acciones para proveer productos médicos a Estados Unidos y otros países para combatir coronavirus.
“Se han implementado diversas acciones para la prevención del contagio y en su volumen de producción, si bien han ido a lo máximo, han incrementado en un 10% la capacidad de producción”, dijo Ramírez.
La empresa inició con un solo producto que venía de Dinamarca –país origen de esta compañía– como una prueba para ver cómo se producía en México; y viendo los resultados que esperaban se decidió traer toda la producción de este país nórdico a México y con el tiempo se han ido adicionando nuevos negocios, teniendo a la fecha 7 familias diferentes de productos.
Convatec tiene presencia en Eslovaquia, Bielorrusia, Dinamarca, Reino Unido, México y República Dominicana.
“Somos el proveedor más grande, no existe otra parte en el mundo que maneje tanto volumen de dispositivos de infusión como nosotros en Reynosa”, destacó Yamil Ramírez.
En tanto, Haemotronic Advanced Medical Technologies se ubica en Reynosa, es una compañía de origen italiano que se dedica a la fabricación de ‘single use medical devices’ como líneas para infusión y diálisis.
Si bien es difícil dar un número único con relación al volumen de producción mensual que tienen, pues son diversos los productos que producen, Ettore Ravizza, presidente del área de Norteamérica de esta compañía, comentó que realizan el equivalente a 5,000,000 de ‘infusion set’ por mes.
Ante el incremento en la demanda de dispositivos y equipo médico por el Covid-19, Haemotronic está implementando diversas acciones para poder proveer productos médicos a México y otros países.
Ravizza explicó que están enviando material a diferentes países y analizando validar opciones alternativas; lo cual es complicado en la industria médica para garantizar un nivel de seguridad al paciente que es lo más crítico.
“Nuestro recurso más importante es el equipo de trabajo empezando con nuestros operadores, de ellos depende si podemos salvar vidas”, manifestó Ettore Ravizza.
En Haemotronic se han implementado todas las medidas necesarias para poder proteger al personal y ayudarles, empezando con transporte exclusivo sanitizado y un sistema de higiene interno excelente.
Además, dentro de la compañía los cuartos de producción son áreas limpias con sistema de filtración contra bacteria y virus, de esta manera protegen a su personal, pues es la medida número uno para ayudar al mundo contra esta pandemia.
Ajustando su producción a la demanda actual de dispositivos médicos y equipos esenciales para afrontar el combate al Covid-19, en Haemotronic han incrementado sus líneas de producción.
“Instalamos una línea dedicada, se adquirieron equipos adicionales y abrimos un nuevo turno para aumentar la producción, estamos contemplando cerca de 100 personas más a la planta en Reynosa”, aseguró Ravizza.
Este incremento en sus líneas de producción les permitió un crecimiento del 20% en abril y 30% para mayo, “sabemos que es un pico y se va a normalizar en los próximos meses”, agregó.
La exportación de productos de Haemotronic va principalmente a Estados Unidos; sin embargo, están trabajando para poder obtener las certificaciones necesarias para poder vender en México, de hecho, Ravizza mencionó que estaban planeando obtener dichas certificaciones para el último cuarto del año; pero ante la situación actual, están haciendo lo posible para adelantar el proyecto.
